Por: Rodrigo Monjardin
EL 7 de diciembre se llevó a cabo el juego que muchos esperaban, los dos mejores equipos de cada conferencia se enfrentarían en un juego que prometía, sin embargo, no resultó en un juego cerrado e interesante como se quería.
Los Celtics se impusieron 127 a 90 por parte de los Suns, el conjunto de Phoenix que lideraba el oeste en la llegada del encuentro, recuperaba a una pieza clave de su equipo, el veterano de mil batallas Chris Paul quien se perdió unos juegos por lesión, pero no ayudó mucho en su vuelta a las duela, ya que registró su peor partido de la campaña con solo 4 puntos y 2 – 4 en tiros completados, lo bueno que le podemos resaltar al guardia veterano fueron sus 4 robos y 4 asistencias para una noche del olvido.
Por otra parte, el equipo de Boston dominó de principio a fin, durante el 3er cuarto, obtuvieron una ventaja de 45 puntos, una cifra abismal, sobre todo porque eran visitantes contra el equipo número uno del oeste. No sorprendería en lo más mínimo verlos nuevamente en las finales de la NBA, pero solo el tiempo lo dirá.