Por: Rodrigo Monjardin
Si nos remontamos al comienzo de la temporada en la bahía de San Francisco, el mariscal de campo titular en los 49ers era Trey Lance, quién posteriormente sufrió una lesión, dejando la puerta libre al veterano de mil batallas Jimmy Garoppolo, un QB con el que los Niners llegaron a dos finales de división y un Super Bowl, en la temporada actual gozaban de un paso fuerte, pero la historia llegó a su fin cuando Jimmy G sufrió una fractura en su pie izquierdo, dejándolo sin posibilidad de regresar por el resto de la campaña.
¿Debería de preocupar en San Francisco la lesión de su QB? Sin duda alguna la pérdida de un mariscal de campo que logra generar jugadas y que se adapta bien al equipo, al esquema de juego siempre será dura; Garoppolo puede que no sea el mejor en su posición, o alguien que deje las mejores estadísticas y que posea los mejores récords, pese a que sea duramente criticado por aficionados de toda la liga, es un QB que entrega resultados y que funciona en el esquema de Kyle Shanahan. Sin embargo, el tercer jugador en la posición de mariscal del equipo no decepcionó.
Brock Purdy, el novato conocido como “Mr. Irrelevant” tuvo su primera aparición como profesional en la NFL, pero a sorpresa de muchos salió a jugar de forma brillante, sin duda la pérdida de Jimmy G es vital, pero San Francisco es un equipo dotado de estrellas ofensivas que ayudan a reducir la carga para la posición de mariscal y eso que no hemos mencionado a la defensiva, que se posiciona como la mejor de la NFL.
Por el momento los Niners firmaron a un conocido del coach Shanahan, el veterano Josh Johnson, que será la tercera ocasión que forme parte del equipo y que logre aportar algo de conocimiento al novato Purdy, que su primera prueba contra los Dolphins no fue pan comido, mérito al jugador y mérito al equipo, ya que la NFL resulta en trabajo colectivo, veremos el desarrollo en la posición para el equipo de la bahía, pero sin duda tiene la postemporada garantizada.